sábado, 2 de mayo de 2015

LESIONES EN LA PRÁCTICA 

DE LA DANZA

Las lesiones más frecuentes que sufre  un bailarín son de:
Tejido blando: Las lesiones de este tejido son los esguinces, distensiones, contusiones, tendinitis y bursitis.

Esguinces 



 Las articulaciones del cuerpo son mantenidas y soportadas por los ligamentos. Estos son fuertes bandas de tejido conectivo que une un hueso con otro en una articulación. Un esguince va de un simple estiramiento hasta una ruptura.
Las áreas más vulnerables son los tobillos, las rodillas y las muñecas.
Esguinces leves mejoran con hielo, reposo, compresión, elevación y terapia.
Esguinces moderados pueden requerir inmovilización.
Esguinces severos pueden requerir cirugía para reparar el ligamento roto.

Distensiones 


Lesión de músculos o tendones, principalmente en miembros inferiores y puede corresponder a un simple estiramiento del músculo o tendón o puede ser una ruptura parcial o completa de alguno de estos.
El tratamiento es similar al de los esguinces.


Tendinitis



Inflamación de un tendón que puede ser debido al proceso de curación luego de un trauma. Se caracteriza por edema, calor, y dolor. También puede ser debido a pequeñas lesiones acumulativas por sobreuso.
El tratamiento se basa en reposo, anti inflamatorios, inmovilización, terapia física.
En casos persistentes y refractarios al tratamiento se puede requerir cirugía.


Bursitis


Las bursas son bolsas llenas de líquido localizadas entre huesos y tendones o músculos. Esta permite al tendón o al músculo deslizarse suavemente sobre el hueso.
Pequeños y repetitivos traumas y sobreusos pueden producir la inflamación de estas estructuras, produciendo edema y dolor.
Las bursitis pueden estar asociadas a tendinitis, según el sitio anatómico.
El tratamiento se basa en reposo, anti inflamatorios, infiltraciones y en casos rebeldes hasta cirugía.

 Las lesiones de tejido óseo más frecuentes son los esguinces, fracturas, luxaciones y calambres.


La parte más afectada son los miembros inferiores y la lesión más común es el esguince de tobillo.


ESGUINCE DE TOBILLO.

Los esguinces del tobillo resultan del desplazamiento hacia dentro o hacia fuera del pie, distendiendo o rompiendo los ligamentos de la cara interna o externa del tobillo. El dolor de un esguince de tobillo es intenso y con frecuencia impide que el individuo pueda trabajar o practicar su deporte durante un periodo variable de tiempo.


CAUSAS

1.    Falta de conocimiento en la técnica; cuando se desconoce, se puede volver una lesión crónica.
2.    Los procedimientos inadecuados pueden presentar rigidez articular y atrofia muscular.

TRATAMIENTO

1.   Va condicionado con el tipo de lesión y debe tratarse con un especialista.
2.   Cerciorarse  de la integridad de todos los componentes.
3.   Se aplica el RICE (reposo, hielo, compresión y elevación.

Reposo -- Es probable que tenga que dejar descansar su tobillo; ya sea completamente o parcialmente, dependiendo de qué tan grave sea el esguince. Use muletas durante todo el tiempo que sienta dolor al apoyarse sobre el pie.

Hielo -- Usar bolsas de hielo, baños con hielo picado o masajes con hielo puede disminuir la hinchazón, dolor, moretones y espasmos musculares. Siga usando hielo durante tres (3) días después de haber sufrido la lesión.

Compresión -- Vendarse el tobillo puede ser la mejor manera de evitar la hinchazón y los moretones. Probablemente, va a tener que mantener el tobillo vendado durante uno o dos días después de la lesión y quizás hasta por una semana o más.


Elevación -- Levantar el tobillo hasta el nivel del corazón o por encima del mismo, le ayudará a impedir que la hinchazón empeore y le ayudará a disminuir los moretones. Trate de mantener el tobillo elevado por lo menos durante dos o tres horas al día si es posible.


Las lesiones de los huesos, articulaciones y músculos ocurren con frecuencia. Estas son dolorosas pero raramente mortales; pero si son atendidas inadecuadamente pueden causar problemas serios e incluso dejar incapacitada la víctima.

Las principales lesiones que afectan a los huesos, tendones, ligamentos, músculos y articulaciones son:

FRACTURAS.

Ocurre cuando un hueso se rompe total o parcialmente que puede ser causada por una caída, un golpe o un movimiento de torsión (contracción violenta de un músculo).
La mayoría de las veces se requiere una fuerza considerable para que un hueso se rompa.
Estas lesiones pueden poner la vida en peligro si van acompañadas de hemorragia arterial o si comprometen el sistema nervioso, produciendo parálisis como en las fracturas de la columna vertebral.

Las fracturas pueden ser:

Fractura cerrada: Es aquella en la cual el hueso se rompe y la piel permanece intacta.

Fractura abierta: Implica la presencia de una herida abierta y salida del hueso fracturado al exterior.

Fractura múltiple o conminuta: Cuando el hueso se rompe en varias fracciones, denominadas esquirlas.


Incompleta:Fisura o un leño verde cuando la ruptura del hueso no es total.


LUXACIONES

Las luxaciones generalmente son más obvias que las fracturas.
Una luxación se observa cuando un hueso se ha desplazado de su articulación. Este desplazamiento es causado, generalmente, por una fuerza violenta que desgarra los ligamentos que mantiene los huesos en su sitio.
Cuando un hueso se sale de sitio la articulación deja de funcionar. El hueso desplazado forma una hinchazón, una prominencia o una depresión que normalmente no está presente.


CALAMBRES

Los calambres son una contractura brusca, involuntaria y dolorosa de un músculo ocasionado por exigir al músculo un esfuerzo repentino, o en personas deshidratadas, como en el agotamiento por calor.

Cuando hay calambre se presenta un dolor fuerte que impide mover la extremidad afectada; se hace presencia de una masa que no es más que el músculo contraído en forma sostenida.